Una de las cosas que más disfruto es viajar, en especial ir a la aventura, tomar la camioneta y manejar sin un plan, dejando que todo fluya. Entonces, aproveché este fin de semana para ir con unos amigos a acampar a uno de los maravillosos pueblos mágicos con los que cuenta nuestro país: Real del Monte, Hidalgo. Dentro de un clima frío y nublado, armamos la casa de campaña y salimos a caminar para identificar el lugar, degustar unos ricos pastes y barbacoa, así como recoger leña para encender la fogata por la noche.
En el Branded Storytelling los relatos deben unificarse en torno a una sola idea para que la audiencia se involucre, se convierta en protagonista, creando así, un vínculo hacia la marca.
Después de un rato de compañerismo, empezó a oscurecer y a cubrirse el cielo de estrellas; el momento preciso para prender la hoguera; un amigo saco la guitarra y empezó la bohemia. La quietud de la madrugada y el sonido del viento dieron paso a la narración de leyendas e historias de terror, momento que no podía faltar para concluir la noche. Desde “La llorona”, “El Nahual”, “Los duendes”, “El puente del diablo”, entre otras, fueron creando una atmósfera de miedo y diversión para concluir la semana.
Los mitos y leyendas brindan un sello de identidad a las tan diversas costumbres y tradiciones de múltiples regiones, culturas y civilizaciones alrededor del mundo, siendo la explicación de los hombres primitivos y/o lugareños para dar respuesta a fenómenos de la naturaleza y en algunos casos, sucesos místicos y sobrenaturales, cuyas causas no podían entender. De esta forma, los sucesos del entorno encontraron sus orígenes en personajes divinos y sobrehumanos resultado de poderes del bien y el mal y su lucha constante.
La clave para que estas leyendas y mitos hayan trascendido en el tiempo es el Storytelling o el arte de contar historias, donde un narrador inicia con el típico “Érase una vez” y transmite un mensaje, conocimiento y/o sabiduría a una audiencia de manera entretenida, utilizando cualquier tipo de habilidades -escrita, musical, artística, creativa- para que la gente lo disfrute, comprenda y retenga la idea transmitida.
Trasladando este arte al mundo de los negocios y de la Comunicación Corporativa, el CEO y los directivos deben ser expertos en el tema al momento de contar la historia de su compañía, transmitir su visión y comunicar la propuesta de valor de sus marcas para que permanezcan en la mente y corazón de sus Stakeholders. A esto se le denomina Branded Storytelling.
Al compartir historias de la marca, el capitán y los distintos gerentes narran una serie de eventos que se desplazan hacia adelante, con un sentido de dirección y un propósito definido. En este relato, los personajes enfrentan obstáculos en su camino para conseguir algo que quieren o necesitan, se plantea un problema y la manera de resolverlo. Ya sea que alcancen o no su meta, se crea una tensión dramática y se genera una carga emotiva que mantiene entretenidos a sus Stakeholders.
Por otra parte, en el Branded Storytelling los relatos que se comunican deben unificarse en torno a una sola idea para que su audiencia se involucre, los hagan parte de su vida y se conviertan en los protagonistas, creando además, vínculos hacia la marca. Estos principios se aplican a dos niveles:
Micro: Incluye anuncios de televisión, sitios web, blogs, spots de radio, aplicaciones y cualquier otro material de comunicación que la marca pueda emplear.
Macro: Nos referimos a la historia global de la marca y su proyección a futuro. A través del relato se contestan preguntas como ¿Cuál es la intención y propósito de la marca? ¿Qué problema reconoce y cómo lo está resolviendo? ¿Cuál es la idea central que unifica a la marca a través de todos sus canales de comunicación?
Anteriormente, las marcas eran relativamente estáticas por naturaleza y se invertía mucho tiempo y recursos en la definición de sus estrategias e identidad, se ponían en el mercado y se dejaba en paz durante años. Pero hoy por la naturaleza global de nuestra economía, las marcas son dinámicas y en constante evolución, por lo tanto, es imprescindible la incesante innovación que deben tener y que les ayude a mantener su liderazgo y participación en el mercado.
Por otra parte, gracias a la Web 2.0, los consumidores están muy involucrados en el desarrollo y expresión de una marca, como es el caso de las Redes Sociales, las cuales animan a millones de personas a compartir su opinión y necesidades en tiempo real, a su vez que marcan el ritmo para la definición y redefinición de lo que una marca es y significa. El desafío para las empresas es mantener su esencia de identidad y comunicar de manera efectiva su Promesa de Marca dentro de este torbellino de reinterpretación infinita.
Cabe destacar que la clave de un Branded Storytelling exitoso es su contenido y debe desarrollarse a la medida de sus Audiencias Objetivo. Para crear y compartir contenido de valor hay que tomar en cuenta sus gustos, necesidades, preferencias, intereses, comportamientos; lo que permitirá establecer empatía.
Contar la historia de la marca de manera original, creativa y novedosa, captará la atención de su audiencia, se diferenciará de la competencia y aportará información valiosa para su vida diaria. El director de cine Andrew Stanton -Toy Story o Buscando a Nemo- sugiere los siguientes tips para contar nuestro relato corporativo:
- Conducir a un sólo objetivo y mostrar consistencia en cada pieza de contenido.
- Capturar la atención de los Stakeholders a través de tintes de humor en los contenidos.
- Narrar un final inevitable, pero no totalmente predecible.
- Contar historias que hagan sentir a los lectores que el tiempo invertido para su lectura/consumo fue valioso.
- Utilizar valores personales, experiencias, conocimientos y vivencias, los cuales aportarán credibilidad a la historia y crearán un vínculo emocional.
Hoy el Branded Storytelling es una realidad en el mundo corporativo y se sugiere que las compañías lo integren en todos los frentes de su Estrategia de Comunicación Holística -Medios Propios, Ganados, Compartidos y Pagados – para replicar la fórmula exitosa de contenido + contexto = experiencias.
Los clientes buscan relatos que sirvan de espejos de su realidad y en los cuales encuentren inspiración y la respuesta para satisfacer un deseo o necesidad.
“Sin conflicto no existe acción, sin acción no hay personajes, sin personajes no hay historia”
Aristóteles
Todas las empresas tienen una historia que contar; por esta razón se debe aportar algo único y diferente. Como CEO, escribe en conjunto con tu equipo y consumidores la historia de la compañía, dentro de la premisa de que “Ser una persona es tener una historia para contar…” Haz que tu marca pase de lo efímero del tiempo a la eternidad… complementa tu lectura, descubre que es Marketing Emocional.